
De nuevo la magia de las palabras de Isabel Allende logra calarme bien hondo...
La autora le narra a su fallecida hija Paula las idas y venidas de su tribu desde que ella no está.
Una novela que vuelve a trenzar esa energía que une a los espíritus y las presencias del pasado, del presente y del futuro en un único camino en que convergen: la vida.
Isabel, eres mi debilidad: sensorial, como la vida misma...
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